Podemos mejorar, descubrir nuevos caminos, arriesgar sabiendo que podemos perder, luchar y esforzarnos porque la vida exige entrega. Cuando nada damos, cuando no sembramos, nada nos llegará de lo alto.
II Domingo Tiempo Ordinario
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Querido Padre Carlos:
Gracias por acercarnos a la figura de Juan el Bautista, por acercarnos a su lado más humano. En mi ignorancia siempre había pensado que Juan y Jesús habían pasado mucho tiempo juntos pues eran primos, y eso le daba a Juan la fortaleza que tuvo durante toda su vida. Como bien nos explicas, no debió ser así, pero…..cuando por fin lo tiene delante de él, no lo sigue !. Humanamente cuesta entender esta reacción, yo seguro que hubiera dejado todo y me hubiera ido detrás de Jesús, pero Juan, es fiel a la misión que Dios le ha mandado y aunque le duela, sabe que se tiene que quedar, sabe que Dios le necesita en ese lugar. Me impresiona !!
Que importante es la autoeducación, para saber cuál es la misión que Dios nos tiene preparada a cada uno. Debemos conocernos y aceptarnos, debemos buscar en nuestra alma y saber cuáles son nuestras verdaderas debilidades, y nuestros verdaderos dones, los auténticos, no los que nos gustaría tener, debemos ser sinceros con nosotros mismos. Y así encontraremos el camino, la misión, que Dios nos tiene preparada, pues como me dijeron hace poco, “a una persona que no sabe pintar, Dios nunca le pedirá que sea pintor”. Quizá la misión que descubramos, no sea tan glamurosa, tan humanamente importante y reconocida, como inicialmente pensábamos, pero al descubrir que es la que Dios nos tiene preparada, estaremos felices, alegres y motivados para llevarla a cabo.
Creo que para la autoeducación, el conocimiento y la aceptación de uno mismo, es vital, la cercanía de un padre espiritual, que te de la confianza para abrir tu alma de par en par, sabiendo que te cuida, te quiere y te guía.
Un fuerte abrazo y muchas gracias por todo.