La vida de José fue un ocultarse por amor a otros. Un dejar de lado una y otra vez sus planes, para que Jesús y María pudiesen cumplir su misión. Es el esposo de María, el padre de Jesús. Sirve la vida de los otros, de los suyos, negándose a sí mismo; su vida fue allanar el camino de los que más amaba. Sin pensar tanto en lo que él quería, rompiendo sus planes propios, sin querer brillar. José se descentró cada día por María y Jesús.