Dios Trino quiere inhabitar nuestra alma para darle un rostro nuevo. Un anuncio dice: «Cambiar significa ir más allá, donde otros no llegan». Nosotros, que hemos sido bautizados en la fuerza de Dios Trino, que vivimos en su presencia concreta y llena de amor, sí que podemos llegar donde otros no llegan. Somos templos del Espíritu, en nosotros vive Dios, sin embargo, con frecuencia nos seguimos sorprendiendo de nuestra debilidad y caídas.